Bob Iger regresa a The Walt Disney Company como CEO, con efecto inmediato, y Bob Chapek deja el cargo.
Iger, quien fue CEO durante 15 años hasta que renunció en 2020 y fue reemplazado por Chapek, asumirá el cargo por un período de dos años.
Disney confirmó el sorpresivo movimiento este domingo, afirmando que la misión de Iger es “establecer la dirección estratégica para un crecimiento renovado y trabajar en estrecha colaboración con el board para desarrollar un sucesor que dirija la compañía al finalizar su mandato”.
“A medida que Disney se embarca en un período cada vez más complejo de transformación de la industria, Bob Iger se encuentra en una posición única para liderar la compañía en este período crucial”, dijo Susan Arnold, presidenta del board.
La decisión de reemplazar a Chapek con Iger, cuyo mandato como CEO es ampliamente reconocido como uno de los períodos más exitosos en el siglo de historia de la compañía -que incluyeron las adquisiciones de Pixar, Marvel, Lucasfilm y 21st Century Fox-, se produce durante un período de intenso escrutinio fiscal para el hogar de Mickey Mouse.
A principios de este mes, Disney reportó ingresos por US$ 20.100 millones correspondientes al cuarto trimestre, por debajo de las expectativas de Wall Street de (US$ 21.200 millones).
Si bien en el trimestre sumó 12,1 millones de suscriptores a Disney+, no fueron suficientes para impresionar a Wall Street y el stock de Disney cayó a US$ 86 por acción.
Al igual que muchas compañías de medios, el precio de las acciones de Disney ha estado en caída libre desde este año: pasó de US$ 156 por acción a principios de 2022 a US$ 91,80 el pasado viernes.
A raíz de los resultados del cuarto trimestre, Chapek anunció un congelamiento de contrataciones en muchos departamentos, así como la creación de un “grupo de trabajo de estructura de costos” dedicado a tomar “decisiones críticas generales necesarias para lograr nuestros objetivos”.
No es ningún secreto que ha habido fricciones entre Chapek e Iger en el pasado, y la capacidad de este último de revertir algunas de las decisiones tomadas por el primero tendrá un impacto significativo en el futuro de la compañía.
Los años de Chapek como CEO de Disney fueron difíciles e incluyeron polémicas públicas, entre ellas con la actriz estadounidense Scarlett Johansson por la pérdida de ingresos cuando el blockbuster ‘Black Widow’ se estrenó simultáneamente en cines y en Disney+.
El ex-CEO también recibió críticas por la respuesta de Disney a un proyecto de ley contra los homosexuales en Florida a principios de este año.
Más recientemente, en junio, fue criticado por despedir a Peter Rice, hasta entonces chairman de Disney General Entertainment. A medida que aumentaba la presión sobre Chapek, el board de Disney respaldó públicamente al ejecutivo y dijo que tenía su “apoyo y la confianza”.
Arnold agregó: “Agradecemos a Bob Chapek por su servicio a Disney durante su larga carrera, incluida la conducción de la compañía a través de los desafíos sin precedentes de la pandemia”.
Por su parte, Bob Iger declaró ser “extremadamente optimista” sobre el futuro de la compañía y que estaba “encantado de que la junta le pidiera que regresara como su CEO”.
“Disney y sus incomparables marcas y franquicias ocupan un lugar especial en los corazones de tantas personas en todo el mundo, especialmente en los corazones de nuestros empleados, cuya dedicación a esta compañía y su misión es una inspiración. Me siento profundamente honrado de que me pidan volver a liderar este extraordinario equipo, con una misión clara centrada en la excelencia creativa para inspirar a las generaciones a través de un storytelling audaz y sin igual”, terminó el nuevo CEO de The Walt Disney Company.
