Filmar en el paraíso: cómo Uruguay está atrayendo a la industria internacional

Sebastián Torterola 23-09-2024 ©cveintiuno

Con uno de los incentivos fiscales al audiovisual más competitivos de América Latina, desde 2019 Uruguay ha conseguido triplicar el volumen de la producción extranjera filmada en el país. Y ahora públicos y privados buscan consolidar su posicionamiento.

Rodaje de la película nominada al Oscar ‘La sociedad de la nieve’

Con una población total que bien podría caber en algún que otro barrio de Ciudad de México o San Pablo (3,4 millones de habitantes), Uruguay es un país que de tanto en tanto desafía estadísticas y lógica a partes iguales.

Si en el fútbol sus dos mundiales, el “Maracanazo” o sus 15 Copas América son un misterio para muchos analistas, en el audiovisual el crecimiento que ha protagonizado el país rioplatense en los últimos cinco años tampoco tiene relación con su pequeño mercado.

Es que Uruguay está rompiendo récords de producciones audiovisuales internacionales filmadas en su territorio. Las 40 semanas de rodajes de producciones extranjeras que hubo en 2020 pasaron a ser 142 semanas en 2021. Si bien este récord se debe a un aumento atípico a raíz de su buena gestión de la pandemia, tras estabilizarse los números se triplicaron con respecto al escenario prepandémico: 76 semanas en 2023, en comparación a las 24 de 2019.

La comparación con el éxito histórico de Uruguay en el fútbol es sin embargo limitada. Porque en el audiovisual sí que hay una serie de razones muy concretas para entender el fenómeno, comenzando por la rapidez de la industria para establecer protocolos sanitarios de filmación en 2020 o el exitoso cash rebate implementado por el gobierno uruguayo en 2019.

Pero hay un factor de fondo que pesa más que todos: la tradición internacionalista de la industria audiovisual uruguaya.

Ernesto Musitelli

“Desde nuestros inicios, el 80% de los servicios que entregamos son de producciones filmadas en Uruguay para el exterior. Por la dimensión de nuestro mercado, lo primero que han hecho siempre los productores uruguayos es salir a buscar coproducciones. En la base del cine nacional siempre hubo coproducción de afuera”, dice Ernesto Musitelli, hoy socio y director general del polo de producción Reducto y también parte de Musitelli, empresa familiar que desde hace 27 años brinda soporte técnico a todo el sector.

El tamaño del país, su estabilidad política y el nivel de sus servicios son otros de los puntos para explicar el fenómeno.

“El aspecto logístico y el tránsito liviano son muy valorados por quienes eligen Uruguay para filmar. Todo queda cerca, todo funciona. Para los que vienen de afuera, es como venir a grabar al paraíso”, dice Mariano Mosca, gerente de Programación de Canal 4, broadcaster que se encuentra abriendo camino en la adaptación de formatos de entretenimiento internacionales para otros países.

Musitelli es una de las empresas más destacadas dentro de Reducto, que ofrece un estudio de 710 m2 y un potente sector totalmente dedicado a la posproducción. En el hub también se encuentran instaladas productoras audiovisuales como Cimarrón Cine y Mueca Films, además de empresas de posproducción como Colour o Montevideo Assist.

Además, conjuntamente con la Intendencia de Montevideo y con la zona de libre comercio Zonamerica, Musitelli está impulsando un nuevo polo audiovisual que acaba de ser anunciado.

“Es un proyecto de parque industrial que contempla tres hectáreas para un campus audiovisual que contará con estudios de 40 x 50 metros y 12 metros de altura. Es algo que no existe en Uruguay ni en la región”, explica Musitelli. Se proyecta una inversión de US$ 17,5 millones aportada en parte por Musitelli y Zonamerica, mientras que la firma de finanzas Capital Oriental trabaja en atraer inversores interesados.

Santiago López

“Hay muchísima gente que hace cuatro años no para de producir y ha incorporado una gran cantidad de horas de vuelo. Cimarrón viene teniendo un promedio de 12 a 14 proyectos de series y películas por año. Y sin perder capacidad técnica: la gente se va contenta con lo que produce en Uruguay,” afirma Santiago López, socio de Cimarrón Cine, productora adquirida en 2023 por el estudio basado en Madrid The Mediapro Studio y que ha ofrecido servicios para películas como la nominada al Oscar ‘La sociedad de la nieve’ o las series de Amazon Prime Video ‘Iosi, el espía arrepentido’, ‘Dom’ y ‘Barrabrava’.

Cimarrón es un caso paradigmático de productores provenientes de la publicidad que lograron dar el salto al cine y a las series internacionales. Luego de que los socios uruguayos Santiago López y Diego Robino se unieran al argentino Hernán Musaluppi en 2018 para abrir Cimarrón en ambos países, iniciaron un proceso intuitivo de coproducciones que desembocaría muy rápidamente en algo más grande.

“Hace tres años, incorporamos a Sandino Saravia para abrir oficinas en México, donde veníamos de hacer la serie ‘Amsterdam’ para HBO. Luego de eso, seguimos con ‘Muxes’ para Mediapro y que se vio por HBO, y con ‘Cecilia’ para Oficina Burman, con pantalla en Paramount+. Finalmente, Cimarrón se incorpora al paraguas de The Mediapro Studio y hoy junto a Oficina Burman somos las dos productoras del grupo en la región”, explica López.

El alcance global que implica formar parte de un grupo como Mediapro, con más de 7.000 empleados y operaciones en 52 sedes de 30 países, representa un punto de inflexión inédito para una productora uruguaya. Pero aparte de la osadía de los productores para lanzarse al mercado internacional, el veredicto de los involucrados es unánime: el éxito reciente responde en gran medida a los incentivos otorgados por el Programa Uruguay Audiovisual (PUA) lanzado en 2019.

Facundo Ponce de León

“El PUA reparte US$ 12 millones por año al desarrollo de guiones, videojuegos y publicidad, además de fondos de coproducción con Brasil y Portugal. También estamos detrás de un fondo con Argentina para el desarrollo de series”, comenta Facundo Ponce de León, presidente del directorio de la Agencia del Cine y el Audiovisual del Uruguay (ACAU).

Además de exonerarles el IVA, el PUA establece que las productoras extranjeras que gasten entre US$ 300.000 y US$ 3 millones reciban un reembolso del 25% de lo que inviertan en Uruguay (tope de US$ 750.000) y del 20% si gastan más de US$ 3 millones (tope de US$ 1 millón). También hay condiciones específicas para animación, posproducción y contratación de talento local.

Por año, unos 38 proyectos extranjeros aprovechan el cash rebate ofrecido por Uruguay, siendo 16 de ellos de cine o televisión y 22 publicitarios.

“Queremos que la atracción de inversiones y servicios de producción internacional repercuta también en el desarrollo del talento local. Para eso, estamos ofreciendo un mayor cash rebate a los servicios de producción que contraten dirección o guionista uruguayo”, dice Ponce de León en referencia al 5% adicional para casos en que la dirección o el guionista principal sean locales y participen al menos en el 50% de la producción.

Mariano Mosca

En un proceso distinto al de las productoras, pero que también se enmarca en el contexto de crecimiento internacional uruguayo, Canal 4 es el jugador que ha sabido golpear primero entre las televisoras abiertas.

Tras la inauguración en 2020 de los mayores estudios del país (900 m2 y hasta 12 metros de altura), y contando con la posibilidad de expandir sus capacidades de producción gracias a los 10.000 m2 que posee su predio ubicado en el puerto de Montevideo, el broadcaster ha dado pasos firmes en su posicionamiento como hub regional a través de la producción de formatos de entretenimiento para diversos mercados.

“En 2020, empezamos la producción de grandes formatos para nuestra pantalla, como ‘Los ocho escalones’ [Kuarzo Producciones], ‘Bake Off’ [BBC Studios], ‘Still Standing’ [Armoza/ITV], ‘The Search’ [Keshet International] y ‘The Price is Right’ [Fremantle]. Luego de dos años de aprendizaje, logramos ponernos al nivel de producción necesario para el mercado internacional”, relata Mosca.

‘Still Standing’ fue el elegido como punta de lanza para la expansión internacional de Canal 4. Primero, prepararon el estudio para la versión uruguaya, titulada ‘Ahora caigo’, que requirió unas 60 toneladas de hierro para montar una estructura a dos niveles que incluyó las “trampas” a tres metros de altura requeridas por el game show.

Tras la conformidad con el resultado (el formato lleva tres temporadas en Uruguay), decidieron aprovechar la estructura montada e internacionalizarlo. Ahí vinieron los primeros acuerdos, anunciados en 2023 y con adaptaciones locales estrenadas en los primeros meses de 2024: primero TelevisaUnivision con sendas versiones para Canal 5 de México y Unimás de Estados Unidos hispano; y luego Teleamazonas hizo lo propio para Ecuador.

Se trata de un movimiento inédito para un broadcaster uruguayo que incentiva el camino de la exportación de servicios. “Tenemos como plan estratégico montar nuevos estudios dedicados a otros formatos”, agrega el gerente de Programación.

‘Still Standing’

“Es la primera vez que vienen canales de televisión extranjeros a grabar en Uruguay. En ese sentido, no fuimos a buscar a las mismas plataformas que ya estaban viniendo de la mano de las productoras uruguayas, sino que abrimos el espectro para que vengan más clientes al país”, comenta a su vez el gerente general de Canal 4, Javier Olivera.

No son pocos los desafíos que deberá enfrentar Uruguay para continuar por esta senda. Según Ponce de León, uno de los más importantes pasa por “delinear herramientas de financiación que no dependan de un decreto”, como lo es el PUA actualmente. Para esto sería necesaria una ley que independice el cash rebate de los movimientos políticos locales, algo que cobra mayor relevancia en un año electoral como lo será el 2024 en Uruguay.

Por otra parte, la pequeña escala de su mercado local hace que sus posibilidades dependen mucho de los vaivenes globales del sector, algo que agrega a su incertidumbre. Sin embargo, como expresa Ernesto Musitelli, los productores uruguayos tienen experiencia en estas lides: “Las crisis son parte de nuestra historia y siempre tuvimos nuestras dosis de riesgo. Pero hasta ahora el sector no ha parado de crecer. Hoy nada nos alerta de que se dejarán de producir y de consumir contenidos”.

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