Directv y Dish Network, tradicionales rivales de la TV satelital, se fusionarán para dar lugar al mayor proveedor de TV paga de Estados Unidos.
Según se anunció este lunes, Directv llegó a un acuerdo con EchoStar para adquirir su negocio de distribución de video, que incluye Dish TV y Sling TV. Está previsto que la operación se complete en el cuarto trimestre de 2025.
Los términos del acuerdo implican una “consideración nominal” simbólica (de US$ 1) y un traspaso de la deuda neta de Dish, cuyo valor nominal total asciende a los US$ 9.750 millones, a Directv.
Dish viene de fusionarse en enero de este año con EchoStar, que hoy cuenta con más de 8 millones de clientes de video. Por su parte, Directv tiene 11 millones entre su servicio satelital, de cable y el servicio por internet Directv Stream.
La nueva compañía fusionada tendrá así más de 19 millones de suscriptores.
La fusión está sujeta a la aprobación regulatoria por parte de las autoridades estadounidenses.
Si bien en otras ocasiones los intentos de movimientos similares no prosperaron por el peligro de monopolio, dada la caída del negocio del cable en Estados Unidos, se espera que la operación no encuentre mayores obstáculos para ser aprobada.
Además de esta compra, las compañías anunciaron que AT&T venderá el 70% que posee de Directv a la firma de capital privado TPG, dueña del restante 30%. TPG pagará por esto US$ 7.600 millones hasta 2029.
