Los ingresos totales del sector televisivo en el Reino Unido se desplomaron en £ 392 millones (US$ 512 millones) hasta los £ 3.610 millones el año pasado debido a los recortes en los encargos, la inflación descontrolada y un mercado publicitario debilitado, reveló la asociación de productores británicos Pact.
La cifra representa una caída del 8,4% con respecto al récord de £ 3.944 millones de 2022, cuando el sector audiovisual experimentaba un auge de contenidos post-Covid.
El CEO de Pact, John McVay, comentó que muchos productores independientes y freelancers experimentaron un “año terrible” en 2023, con varias productoras en quiebra.

Los resultados corresponden a la publicación de la encuesta anual de Producción Televisiva en el Reino Unido que elabora Pact (Alianza de Productores de Cine y Televisión, por sus siglas en inglés).
Por rubros, los ingresos domésticos de TV cayeron en £ 183 millones, situándose en £ 2.020 millones durante el ejercicio fiscal 2023, lo que representa una disminución del 8,3% interanual.
A su vez, los ingresos totales por commissions en el Reino Unido cayeron a £1.780 millones, una disminución del 10,2%, debido principalmente a una caída del 35,4% en los ingresos provenientes de encargos de empresas como Sky y UKTV.
Los encargos internacionales también disminuyeron en £ 209 millones (14,7%), debido a las huelgas del Writers Guild of America y SAG-AFTRA en Estados Unidos, que provocaron una caída drástica de greenlights por parte de los broadcasters internacionales.
Los encargos por parte de plataformas de streaming como Netflix, Prime Video y Disney+, en cambio, se mantuvieron estables en £ 684 millones, con una disminución de apenas 1,8%.
En cuanto a las tendencias, el drama siguió siendo el género más valioso, pero los programas de entretenimiento factual aumentaron su cuota de mercado en un 8%, probablemente debido al éxito de relanzamientos de formatos como ‘Gran Hermano’.
A pesar de las numerosas caídas, los ingresos totales del sector de producción televisiva del Reino Unido se mantuvieron muy por encima de los niveles previos a la pandemia.
De acuerdo a John McVay, no es posible además establecer aún si la tendencia a la baja continuará.
“Claramente hay una disminución significativa año tras año. ¿Pero estamos viendo el comienzo de una tendencia diferente, donde ese declive se acelera? La respuesta es que simplemente no lo sabemos aún. Espero que sea una corrección hacia la trayectoria normal que vimos en 2019”, explicó.
“La encuesta de 2023 muestra cuántos productores están sintiendo realmente el impacto de la crisis financiera y las duras condiciones del mercado, pero también que los productores son resilientes y capaces de diversificarse en estos tiempos difíciles. La encuesta del próximo año nos dará una idea más clara del impacto a largo plazo de la incertidumbre de los últimos años”.
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