Los ingresos por ventas internacionales de contenido francés disminuyeron en 2023, con el sector de animación siendo particularmente afectado por la caída del gasto por parte de los compradores globales.
Las ventas de programación francesa alcanzaron el año pasado los € 203,4 millones (US$ 224 millones), una caída del 5,3% en comparación con las cifras récord de 2022.
Aunque peores que los del año pasado, los resultados se colocan de todas formas a niveles históricos: es apenas la tercera vez en 30 años que las exportaciones de contenido francés superan la marca de los €200 millones.
Las cifras se dieron a conocer en el informe anual conjunto de UniFrance y el Centro Nacional del Cine y la Imagen Animada (CNC) durante Le Rendez-vous en Le Havre esta semana.
El informe reveló también que las exportaciones totales de contenido francés, que incluyen ventas, preventas y contribuciones a coproducciones, cayeron un 3,3% interanual, situándose en € 309,2 millones.
El drama scripted sigue siendo el sector más robusto del audiovisual televisivo francés, representando el 36,6% de las ventas totales, con €74,5 millones en ventas, una caída del 7,7% respecto a 2022.
Impulsando esas ventas aparecieron el año pasado contenidos como ‘HPI’, ‘Marie Antoinette’, ‘Bardot’ y ‘B.R.I.’, mientras que procedimentales como ‘Deadly Tropics’ y ‘Astrid: Murder in Paris’ también encontraron buena acogida internacional.
El contenido factual, por su parte, registró ventas totales por € 47,2 millones, una caída del 3% en comparación con el desempeño récord de 2022.
El informe destaca el buen rendimiento de documentales sobre actualidad, ciencia e historia, como ‘La Grande Traque’, ‘Iznik: Les Mystères de la Basilique Engloutie’ y ‘La Bataille du Cobalt’.
Las peores noticias las recibió en tanto el sector de la animación, cuyas ventas se desplomaron a € 51,2 millones, una disminución del 11,2% respecto al año anterior.
El reporte atribuye esta caída a una fuerte disminución en las ventas de animación a Estados Unidos, que bajaron un 69,7%, hasta los €4,3 millones.
Las dificultades en el sector de la animación no son sorprendentes, especialmente después de que C21 informara en mayo que varios de los principales estudios franceses habían reducido sus operaciones debido a cancelaciones de proyectos por parte de plataformas estadounidenses.
Aunque el informe subraya los efectos negativos de la contracción de la industria y la reducción de los encargos en Estados Unidos, las ventas han mostrado una recuperación en Europa Occidental, tradicionalmente el principal mercado para los programas franceses.
La región representó el 46,8% de los ingresos por exportación del contenido francés, un aumento de 6,1% con respecto al año pasado, alcanzando € 95,1 millones.
En contraste, América del Norte representó € 22,3 millones, con una cuota de mercado del 10,9%, aunque aún superior a Asia/Oceanía (€ 14 millones) y Europa Central y Oriental (€ 13,1 millones).
Por países, Bélgica fue el principal comprador de programas franceses, con ventas por € 17,1 millones, seguida por Reino Unido/Irlanda en segundo lugar con € 12,9 millones y Alemania/Austria en tercer lugar con € 12,4 millones.
Reflejando las desafiantes condiciones del mercado al otro lado del Atlántico, los compradores estadounidenses gastaron € 9,5 millones el año pasado en contenidos franceses, una caída significativa desde los € 19,2 millones registrados en 2022, cuando Estados Unidos era el principal país comprador de contenido francés.
Finalmente, después de alcanzar un récord en 2022, las ventas de derechos globales cayeron un 20,1%, alcanzando un total de € 46,3 millones.
Cécile Lacoue, directora de investigación del CNC, comentó: “El mercado fue especialmente complicado en 2023. Hubo difíciles condiciones económicas con una inflación generalizada, además de muchos cambios entre los compradores, reducción de personal y la reestructuración de grandes corporaciones como Warner Bros. Discovery”.