La productora combina contenidos originales y servicios de producción, con una apuesta boutique que mezcla know-how técnico, creatividad y fórmulas financieras innovadoras para navegar el ecosistema de incentivos en Colombia y Puerto Rico.

En una industria donde por momentos solo parece haber sitio para las grandes factorías de contenido, Perrenque Media Lab elige desmarcarse y sacar pecho por lo opuesto.
“Somos, antes que nada, una familia, un grupo de amigos que nos entregamos en cada proyecto”, resume Nicolás Martínez, chief content officer de la productora con sedes en Colombia y Puerto Rico, donde operan como Ítoko Media.
Junto a Martínez, Perrenque está liderada por la CEO Cristina Villar y el COO y CFO Federico Nieto, un equipo que acumula una amplia experiencia en roles de producción (producción general, en línea, gerencia y supervisión), guion, dirección, asistencia de dirección y dirección de fotografía.
Y aunque su propuesta combina contenidos originales y servicios de producción, todo nace desde la misma perspectiva: cuidar mucho lo que hacen.
“Somos una boutique y queremos hacer sentir a nuestros clientes en casa, apoyados, que pueden soltar el automático. Trabajamos hands-on desde el desarrollo creativo hasta la posproducción”, dice Martínez.
Aunque el equipo dio servicios de producción a títulos como la película de terror de Víctor García ‘The Damned’, y la comedia dramática de Andrés Burgos ‘Sofía y el Terco’, bajo la marca Perrenque inauguraron esta línea de negocio con la cinta ‘Long Gone Heroes’ (2024), distribuida por Lionsgate.
Dirigida por John Swab y con Frank Grillo, Andy García, Eden Brolin y Josh Hutcherson en los roles principales, la película rodada en Colombia sigue a un exsoldado en una misión de rescate en América Latina que lo arrastra a una guerra secreta de intereses políticos y mercenarios.
Se trata de un thriller bélico de acción, un terreno en el que Colombia se ha especializado a la hora de dar servicios.
“Generalmente nos buscan para la acción”, afirma Martínez. “Desde la serie ‘Narcos’ la tendencia fue mostrar favela, pobreza, jungla, río… y muchas producciones han venido a rodar a Colombia imitando ese tipo de escenarios”.
“Hoy sabemos cómo conseguir helicópteros, uniformes, dónde alojar al crew, cómo organizar transporte y qué locaciones funcionan. También dominamos áreas como la importación de equipos especiales, los SPFX, la seguridad y el manejo de armas en el set. Todo ese engranaje ya está afinado”, agrega.
Además de Bogotá como base de operaciones, ciudades como Medellín, Cali, Santa Marta o Barranquilla han empezado a ofrecer redes de equipos propios que facilitan rodajes en el Caribe o el Pacífico.
Pero todo esto no ha ocurrido de un día para otro, y gran parte de su explicación viene naturalmente de los incentivos colombianos a la producción audiovisual.
Es que en 2012 Colombia transformó su industria primero con el Fondo Fílmico Colombia (FFC), un cash rebate que devuelve un 40% de los servicios audiovisuales y un 20% de los gastos logísticos, y en 2020 dio el gran salto con el Certificado de Inversión Audiovisual (CINA), un tax rebate transferible que reembolsa el 35% de los impuestos y se comercializa en el mercado de valores, consolidándose como motor clave para atraer rodajes internacionales.
Y, en busca de facilitar el acceso al incentivo a productores internacionales, desde Perrenque están explorando fórmulas financieras que les permitan resolver el reto del cashflow inicial, trabajando con inversores que precompran casi la totalidad del monto del estímulo.
“En lugar de que el productor ponga US$ 100 y espere el reembolso de US$ 35 al final, ofrecemos que un inversor anticipe US$30 y así el productor solo debe desembolsar US$ 70. Una vez liberado el CINA, el inversor recupera su dinero y recibe un margen de beneficio que no alcanza US$ 5, ya que en la práctica el neto siempre es algo menor”, ejemplifica Martínez.
Este tipo de modelos, asegura, solo son planteables gracias a la fiabilidad del esquema colombiano. “El incentivo funciona. Hoy los tiempos del proceso están muy claros y son confiables. Lo que se promete, se cumple”.
Sin embargo, la situación no es la misma en Puerto Rico.
El territorio ofrece créditos contributivos transferibles de hasta el 40% sobre gastos locales, un 20% en pagos a no residentes y hasta un 40% para infraestructura. A esto se suma un crédito adicional del 15% para coproducciones con productores locales que promuevan la representación de Puerto Rico en pantalla. Pero en la práctica estos incentivos tienen aún mucho camino por recorrer.
“Después de algunas malas experiencias donde tuvimos que renunciar a trabajar con potenciales clientes por no poder prometerles una línea de tiempo confiable y transparente para la ejecución de los incentivos de Puerto Rico, hoy somos más cautos”, afirma Martínez.
“Hay buenas intenciones y seguimos esmerándonos para que se regule mejor y se dé una mayor transparencia al sistema, de modo que lo que está escrito se cumpla y los procesos se puedan monitorear públicamente”.
Ítoko Media no obstante trabaja activamente en San Juan, desde donde también puede coordinar operaciones en Estados Unidos, incluyendo la puesta en marcha de rodajes.
Y en el área de contenidos originales, la vena creativa de los socios de Perrenque se traduce actualmente en un slate de desarrollo de más de 20 proyectos, con foco en thrillers pero que también incluye historias de true crime, dramas y romcoms.
“Estamos abiertos a todo, porque nos gusta todo. Venimos de haber hecho mucho cine, publicidad, videoclips, y cada proyecto nos aportó un know-how distinto. Estamos abiertos a trabajar en cualquier género, porque sabemos cómo hacerlo y dónde encontrar la gente que se necesita para hacerlo bien”, señala el productor.
Con una mezcla de romanticismo y pragmatismo, Perrenque reflexiona sobre su lugar en la industria.
“Es un momento desafiante”, reconoce Martínez. “Nosotros lo que es filmar, sobrevivir en un set, transmitir una idea a una audiencia y hacer posible la magia… todo eso lo dominamos. Pero por momentos parece que ser muy bueno en lo tuyo no basta, que hoy pesan más otras habilidades que tienen que ver más con la promoción”.
Lejos de dejarse caer, saben que la respuesta está en su propio nombre: en Colombia, Perrenque describe a alguien con determinación, con esfuerzo, con tenacidad. Es una expresión que resalta un espíritu de resiliencia y dedicación. “¡Garra!”, dicen.
“Con nosotros, los clientes se llevan más que el nombre de una compañía”, asegura Martínez. “Es una marca cimentada en cómo entendemos este oficio y por qué solo sabemos hacerlo de esa manera”.



















