
SHOOTING LOCATIONS MARKETPLACE: En un momento de competencia creciente entre territorios, Juan Manuel Guimeráns, presidente de la Spain Film Commission (SFC), subraya que el éxito del audiovisual español depende de la cooperación más que de las rivalidades internas, y de mejorar los incentivos fiscales para mantener su competitividad internacional.
En el marco del Shooting Locations Marketplace, el encuentro que reúne en Valladolid a localizadores, productores y comisiones fílmicas de todo el mundo, Guimeráns defendió una visión integradora del sector, basada en el aprendizaje compartido y la mejora continua.
“Yo creo que cualquier medida positiva es buena. El que haya producción en algunas partes de España no es malo para otras partes de España. Lo que tenemos que hacer es aprender. Vivimos en un ecosistema, no en un juego de suma cero, es un proceso acumulativo”, dijo en diálogo con Cveintiuno desde Valladolid.
Guimeráns se refirió a la “competencia” entre regiones del país por atraer rodajes, utilizando como gran atractivo los incentivos fiscales, un campo en el que Canarias, País Vasco y Navarra cuentan con ventaja por ofrecer porcentajes de devolución más altos que el tipo general del 25-30% de España.
“Lo que decimos a los compañeros del País Vasco, de Navarra y de Canarias es: enhorabuena, muy bien, utilizad eso y generad mucha demanda, porque seguro que de alguna manera eso nos va a beneficiar a todos”.
La cuestión de la competencia interna parece ser más bien una distracción del verdadero desafío: el internacional. “A las autoridades nacionales les decimos: no porque haya incentivos específicos en algunas regiones hay que dejar de mejorar el incentivo común. Tenemos que hacerlo porque nos estamos quedando por detrás en el contexto global”, afirmó Guimeráns.
Según el presidente, España construyó su éxito reciente sobre cuatro pilares: industria local, localizaciones, clima e incentivos. “Si uno de esos pilares baja, no perdemos totalmente la competitividad, pero sí una parte de ella”, advirtió.
“El problema ahora no son las diferencias entre regiones, sino que nuestros competidores europeos han mejorado sus incentivos. Nosotros debemos hacer lo mismo”, apuntó. Además, la mejora debe darse también en el ámbito cualitativo.
“El 25-30% del régimen común está por debajo de la media de los países competidores, pero también lo debemos mejorar en los procedimientos de declaración, reclamación y, sobre todo, supervisión de los incentivos. En ocasiones las productoras nos trasladan su preocupación porque durante demasiado tiempo los proyectos quedan abiertos a revisión por parte de las autoridades tributarias”.
Más allá del debate fiscal, Guimeráns destacó el crecimiento de las infraestructuras de producción como un indicador del dinamismo del sector.
“Hoy tenemos Ciudad de la Luz a pleno rendimiento y disponible para cualquier productora nacional o internacional. Además, hay proyectos prácticamente en todas las comunidades: Madrid Content City, el Parque Audiovisual de Cataluña, nuevas instalaciones en el sur, en Barcelona, en Canarias… y acaba de abrir Pedralonga en A Coruña”, enumeró.
A esa lista se suman otros polos emergentes como la Ciudad del Cine en Toledo o Distrito 7 en Zaragoza. “Todo esto demuestra que no son solo los incentivos los que atraen la actividad, sino también la infraestructura y la profesionalización del sector”, sostuvo.

Ante los cambios tecnológicos que sacuden al audiovisual, Guimeráns se mostró optimista y pragmático, sosteniendo que el trabajo del sector es detectarlos, entenderlos y usarlos a favor.
En el marco del plan Spain Audiovisual Hub, la comisión lideró el proyecto Virtual Locations, centrado en virtualizar localizaciones para que no sea necesario rodar físicamente en ellas. El proyecto, desarrollado junto a Patrimonio Nacional y El Ranchito, se realizó en El Escorial y evidenció las ventajas que tiene virtualizar determinados espacios.
“Cuando escuchas hablar de eso y te dedicas a la gestión de localizaciones, lo primero que te da es miedo: piensas que te vas a quedar sin trabajo”, dijo Guimeráns. “Pero descubrimos todo lo contrario. La virtualización puede ser una herramienta de promoción, de conservación y también de eficiencia para las producciones”.
En esa misma línea, también destaca el camino que desde la SFC se ha comenzado a recorrer en materia de rodajes sostenibles, colaborando con empresas especializadas, como Screenfield, y con el ICAA en el desarrollo de un sello nacional de rodajes sostenibles.
“Participamos en todas las iniciativas porque lo consideramos uno de nuestros fuertes y, sobre todo, una de nuestras obligaciones. No se trata solo de sostenibilidad medioambiental, sino también territorial. Hay que entender que detrás de un rodaje hay comunidades locales que acogen a las producciones. Hay que ser respetuoso con ellas, darles valor y ofrecerles una ventana desde la que también puedan expresarse”, afirmó el presidente.
De cara al futuro, la SFC refuerza su vocación internacional con el foco puesto en la alianza iberoamericana y la apuesta por Asia. Por un lado, con América Latina participa activamente en Iberofic, la red iberoamericana de film commissions impulsada desde Buenos Aires, con el idioma común como mayor activo.
“No tiene sentido que en un mercado tan potente como es el iberoamericano no seamos hegemónicos. Porque revertir la primacía del audiovisual estadounidense es muy difícil, pero podríamos tener mucho más protagonismo”.
Esa cooperación, sostiene, debe venir de las administraciones y también de los productores con el fin de generar más contenido conjunto y fortalecer la industria regional.
En el frente asiático identifica dos grandes mercados que por distintas razones siguen siendo complejos: India y China. “India tiene una enorme capacidad de producción, pero cada vez rueda más fuera y consume más contenido extranjero. España puede ser su puerta de entrada al audiovisual iberoamericano. De hecho, el próximo año será el Año Dual España–India, centrado en las relaciones culturales, turísticas y tecnológicas, y estamos muy bien posicionados”.
En cuanto a China, Guimeráns reconoce las dificultades, pero también las oportunidades. “Es un mercado enorme, muy hermético, pero con todas las prevenciones y cautelas que hay que tener, nosotros también tenemos mucho interés en mejorar nuestra presencia allí”, contó. De momento, la SFC mantiene conversaciones con China Media Group, el conglomerado del audiovisual del gobierno chino.
Con muchos desafíos pero también varias oportunidades, Guimeráns ve el futuro del audiovisual español con mucho optimismo.
“España tiene un tejido industrial consolidado, proyectos de inversión en infraestructuras muy potentes y una industria nacional que se ha fortalecido en los últimos años. Eso se consolida más allá de que las cifras puedan subir o bajar trimestralmente. Creo que la tendencia será al alza, primero porque España está muy bien posicionada y ha hecho un gran trabajo en todos los territorios, y segundo, porque hay demanda”, concluye.
“España tiene un tejido industrial consolidado, tiene proyectos de inversión en infraestructuras muy potentes, una industria nacional que se ha fortalecido en estos años y eso se lo optimizan más allá de que las cifras puedan subir o bajar trimestralmente. Yo creo que la tendencia va a ser a mayor, primero porque España está muy bien posicionada, ha hecho un muy buen trabajo, los deberes en todos los territorios y luego -y no menor- porque hay demanda”, concluyó.



















