Las coproducciones cinematográficas entre España y México crecieron un 75% en los últimos cinco años mientras ambos países evalúan extender su acuerdo de coproducción también a otros formatos, como las series.
El dato fue revelado este lunes en el marco de las primeras jornadas audiovisuales “México-España: Construyendo puentes creativos”, que se realizaron en la Ciudad de México.
El evento contó con 13 compañías del sector audiovisual español, que se reunieron con representantes del ecosistema de producción mexicano con el propósito de identificar nuevas vías de colaboración que impulsen el crecimiento económico y creativo a través de coproducciones.
México y España cuentan con un acuerdo bilateral de coproducción vigente desde 2004, que ha permitido coproducir 90 películas desde su lanzamiento.
Su reciente flexibilización, sin embargo, motivó un crecimiento del 75% en las coproducciones entre ambos países en los últimos años.
“El acuerdo de coproducción está en vigor desde 2004. Ha sido bastante fructífero y muy moderno para su época. De hecho, hemos llegado a coproducir más de 90 películas, de las cuales se han realizado 70 en los últimos cinco años”, explicó Rocío Juanes de Toledo, secretaria general del Instituto de la Cinematografía y de las Artes Audiovisuales (ICAA) durante uno de los paneles del evento.
Diana Tita Martínez Chiapas, de la Dirección de Apoyo a la Producción Cinematográfica del IMCINE, subrayó en tanto que este crecimiento es debido a los cambios introducidos en el acuerdo, inicialmente diseñado para proyectos que nacieran como binacionales y que hoy ofrece más flexibilidad al permitir integraciones en etapas distintas del desarrollo.
“Estas jornadas caen como anillo al dedo para pensar y reflexionar en evolucionar este acuerdo. Inicialmente estaba hecho para coproducciones que desde su origen estaban planteadas como coproducciones, ahora se puede hacer en distintas etapas del desarrollo de una película”, señaló.
Una de las discusiones de mayor recurrencia en los foros internacionales de producción gira en torno a la necesidad de actualizar la distinción que hacen los gobiernos de algunos países entre cinematografía y producción audiovisual en general, incluyendo formatos como las series para plataformas y contenidos digitales.
“Creo que sería muy interesante estudiar el tema de las series dentro del acuerdo de coproducción con México. Actualmente la coproducción solo abarca la cinematografía”, agregó Juanes de Toledo.
En el caso de México, el IMCINE continúa siendo la entidad gubernamental responsable de otorgar estímulos para la producción audiovisual.
Sin embargo, su alcance es limitado a la cinematografía, lo que ha impulsado a organismos privados como la Cámara Nacional de la industria audiovisual (Canacine) o la recontentamente creada Federación Mexicana de Productores de Cine (FMPC), a asumir un papel más activo en el diseño y promoción de estímulos fiscales aplicables a un espectro más amplio de contenidos.
“El contexto audiovisual a nivel global exige una mayor colaboración entre países. España es un socio afín para México y nos emociona la posibilidad de crear sinergias que deriven en intercambios concretos de producción y distribución, y que tracen nuevas rutas para el talento creativo y técnico de ambos países”, destacó sobre el evento Elena Fortes, fundadora y CEO de la productora mexicana Fiasco.
“Estas jornadas para nosotros son solo un comienzo. Tenemos la firme voluntad de que esto sea un punto de inicio que vayamos a continuar en años sucesivos. Porque creemos firmemente en el potencial de nuestras industrias y la fuerza de colaboración entre México y España”, agregó Teresa Martin Lezama, de Audiovisual from Spain.
Las Jornadas Audiovisuales México-España contaron con la participación de las compañías españolas 39 Escalones Films, 59 en Conserva, Antivaho Cinematográfico, EFD Studios, Grupo Ganga, iZen, La Kaseta Ideas Factory, Lemendu, Little Spain, Mediacrest Entertainment, MLK Producciones, Movistar Plus+ International y Onza Entertainment.
Por México participaron más de 70 empresas mexicanas productoras, distribuidoras y plataformas locales.
El evento contó con una conversación con Francisco Ramos, vicepresidente de Contenidos de Netflix Latinoamérica en la Oficina Económica y Comercial de España en México, una visita a la casa del embajador de España en México, una visita a por los estudios cinematográficos EFD Studios México y una serie de paneles en el Centro Cultural de España en la Ciudad de México.
“Para el IMCINE es muy importante participar y apoyar este tipo de intercambios, sobre todo entre dos países cuya historia -e historias-, han atravesado el tiempo. El potencial de ambos territorios como centros de producción audiovisual -con sus múltiples y diversas regiones- impulsa a imaginar nuevas rutas de colaboración y nuevos acuerdos para actualizar las condiciones cinematográficas de ambos países”, destacó Daniela Alatorre, directora del IMCINE.
El evento dejó así abierta la posibilidad de fortalecer un puente creativo entre ambos países que ya ha dado frutos, pero que podría convertirse en un eje clave para el desarrollo conjunto de contenidos en español con impacto global.
“Hay una gran voluntad de que el sector audiovisual sea pilar en el crecimiento español. Yo no he visto en 25 años en la administración una coordinación mayor para poder poner todos juntos al sector audiovisual como un sector estratégico”, finalizó María Piña de ICEX España.
