El Comité de Cultura, Medios y Deporte del Reino Unido (CMSC, por sus siglas en inglés) ha recomendado oficialmente al gobierno imponer un impuesto del 5% a las plataformas de streaming por suscripción (SVOD) y ha advertido que “se necesita una acción urgente para proteger el contenido distintivamente británico”.

En un informe publicado por el CMSC, el impuesto aparece como parte de un “paquete urgente de apoyo al sector británico de drama premium, que atraviesa una crisis”, y que los parlamentarios proponen que se implemente cuanto antes.
El paquete incluye una serie de medidas “para frenar el declive en la producción nacional de películas y programas británicos con identidad cultural, cuya evolución no ha logrado mantener el ritmo del crecimiento de las grandes producciones financiadas y controladas desde fuera del Reino Unido”.
El comité ha instado a plataformas como Netflix, Amazon, Apple TV+ y Disney+, que se benefician del talento de productores británicos, a “respaldar con hechos su discurso y comprometerse a aportar el 5% de sus ingresos por suscriptores en el Reino Unido a un fondo cultural que ayude a financiar dramas con especial relevancia para las audiencias británicas”.
La recomendación surge tras la reciente investigación del comité sobre el cine británico y la televisión premium, y cuenta con el respaldo del director de ‘Wolf Hall’, Peter Kosminsky, quien ha sostenido que los streamers estadounidenses han elevado tanto los costos de producción que los broadcasters públicos británicos ya no pueden permitirse producir series de alto nivel.
En respuesta al informe, Kosminsky declaró: “Celebro enormemente que el comité haya respaldado el llamado a un impuesto del 5% sobre los ingresos de los streamers para apoyar la televisión pública de alta gama. Es una decisión valiente en el clima político actual y absolutamente la solución adecuada”.
El informe no detalla quiénes podrían beneficiarse del fondo recaudado, ni si las propias plataformas que aportan tendrían acceso a él.
Ante esto, Kosminsky añadió: “Es importante estipular que el fondo creado con este impuesto solo debería estar disponible para producciones encargadas o coproducidas por un canal público”, algo que calificó como “un aspecto esencial del impuesto del 5% como solución a los problemas que enfrenta nuestra industria”.
El paquete de apoyo del CMSC también incluye un crédito fiscal para impulsar la distribución de películas de bajo presupuesto, una serie de recomendaciones para mejorar los derechos laborales en la industria (especialmente los de los freelancers) y exigir licencias obligatorias para cualquier obra creativa utilizada en el entrenamiento de modelos de IA.
Desde Netflix ya dejaron entrever que, de aprobarse esta medida, subirían sus tarifas locales en el Reino Unido.
“En un mercado global cada vez más competitivo, es fundamental crear un entorno empresarial que incentive la inversión, la toma de riesgos y el éxito, en lugar de penalizarlos. Los impuestos reducen la competitividad y castigan a las audiencias, que al final son quienes asumen el aumento de los costos”, dijeron desde el streamer a través de un comunicado.



















