Casi cuatro de cada diez usuarios activos mensuales de YouTube consumen contenido tradicional como series, películas o documentales en la plataforma, revela un nuevo estudio de Ampere Analysis.
La cifra incluye un promedio de los usuarios de todo el mundo, pero varía según la región.
En América Latina, por ejemplo, el promedio es según Ampere ligeramente superior, llegando al 40%. Y las cifras son especialmente altas en Asia Pacífico, donde el 45% de los usuarios activos mensuales ven documentales, series o películas.
En el otro lado del espectro, en Europa occidental el número cae al 28%, mientras que en América del Norte se alinea con el promedio global del 37%.
El consumo de estos contenidos se da en todos los grupos demográficos, pero tiene una ligera concentración en usuarios de entre 35 y 44 años y en hogares familiares.
Además, entre quienes consumieron tanto documentales como series o películas en el último mes, el 34% usó smart TVs para parte del visionado, frente al 22% del total de usuarios de YouTube.
De todos modos, el smartphone sigue siendo el dispositivo más utilizado para ver YouTube en este grupo, con un 77%, seguido por las computadoras o laptops (37%).
El informe también destaca que YouTube es la plataforma de streaming con mayor base de usuarios activos del mundo: el 84% de los usuarios de internet lo usa mensualmente, el 73% semanalmente y el 59% todos los días.
“La plataforma más vista del mundo ha recorrido un largo camino desde sus inicios con videos caseros, bromas y vlogs de baja calidad”, dijo Daniel Monaghan, director de investigación de Ampere Analysis. “Esos formatos siguen siendo populares, pero hoy también vemos series completas y películas subidas por grandes estudios, productores y canales”.
“Eso puede generar cierta canibalización en las plataformas propias de los estudios, pero el alcance de YouTube hace que la posibilidad de expandir la audiencia y generar ingresos a través de acuerdos publicitarios sea imposible de ignorar”, agregó.
“Creemos que el engagement seguirá creciendo, especialmente a medida que YouTube se afianza en los smart TVs y deja de ser solo una experiencia móvil o de escritorio”.
