La fórmula de Onza para aplicar creatividad a la financiación de contenidos 

En su primera década, Onza se ha posicionado como una de las compañías españolas más sólidas a la hora de encontrar estructuras financieras creativas para la producción audiovisual, que incluyen el dominio en el trabajo con incentivos fiscales y una firme apuesta por la coproducción, donde el talento se entiende como un socio más. 

Con una década de vida pero varias más de experiencia acumulada en su equipo, Onza es una productora y distribuidora de contenidos de ficción y entretenimiento con sedes en Madrid y Miami y proyección global.  

A partir de su primer proyecto, la serie ‘El Ministerio del Tiempo’ que la cadena pública RTVE estrenó en 2015, Onza fue ganando peso en el panorama de la ficción televisiva española, con series locales como ‘Pequeñas coincidencias’, ‘Parot’ o las recientes ‘Perverso’ y ‘Atasco’.  

De cierto modo adelantándose a lo que hoy se ha convertido en norma y en necesidad, ya en 2018 la productora afrontó ‘Hernán’, serie de ficción sobre el conquistador Hernán Cortés, bajo un modelo de coproducción con el estudio mexicano Dopamine, y con un estreno multiventana que incluyó SVOD (Prime Video), TV paga (History Channel) y TV abierta (TV Azteca).

Tras consolidar en España su modelo, que se extiende al talento creativo a la hora de pensar en alianzas, en 2021 Onza dio su primer paso en su expansión internacional con el lanzamiento de Onza Américas, filial dirigida al mercado latinoamericano e hispano de Estados Unidos. En este corto tiempo, produjo la serie ‘Isla brava’ para ViX, cuya segunda temporada está en postproducción; cerró una alianza con la productora mexicana BH5 Studios, de Rodrigo Trujillo; y está trabajando en la adaptación del formato de la comedia ‘Atasco’ para otros países de América Latina. 

“Somos productores, pero tenemos vocación empresarial”, define su fundador y presidente, José María Irisarri, sobre lo que hay detrás de este crecimiento.  

“Desde su fundación, Onza tiene en su ADN el buscar modelos de negocio con alianzas, manejo de incentivos y modelos creativos de negocio”, agrega la directora de Desarrollo de Onza Américas, Inés Havraneg.  

¿Cómo se equilibra la parte creativa y la financiera en los proyectos de Onza? 

José María Irisarri (JMI): Nosotros somos apasionados de la creatividad, lo que nos gusta es la televisión y el cine, y ese siempre será nuestro punto de partida.  

Ahí se construye un proceso que inicia con la identificación de un contenido que creemos que puede viajar y funcionar bien. Luego estructuramos las piezas clave, como el guion, la dirección, el cast y la localización, y sobre eso dimensionamos el presupuesto. En función de eso, vemos en qué ventanas puede interesar y empezamos a armar el puzzle: el inversor financiero, las desgravaciones, los incentivos, la financiación de terceros… Construimos en base a un presupuesto que nos marcamos de partida. Si no llegamos a eso, ese gap no lo cubrimos, no arrancamos.  

En nuestro caso, no vivimos de los fondos europeos. Somos productores, pero tenemos vocación empresarial. Y eso nos anima, nos impulsa y nos llena de posibilidades.  

¿Cómo es el trabajo con el talento? 

Inés Havraneg (IH): Nos gusta considerar a los creadores y creativos como socios en cada proyecto. Creemos que su voz, su visión y su pasión son ingredientes fundamentales para el éxito de las producciones. Habiendo dicho esto, nuestra principal labor es acompañar el trabajo creativo para que alcance su máximo potencial artístico, pero también amplificar sus posibilidades de venta aportando nuestra experiencia y conocimiento de la industria.

Y, además de potenciar y desarrollar esta parte creativa, Onza también es especialista en estructurar proyectos desde el punto de vista financiero. 

¿Por dónde pasan esas estructuras financieras actualmente? 

IH: Tenemos un gran conocimiento de los incentivos fiscales y otras ayudas tanto en España como en el extranjero, lo que nos permite ofrecer a nuestros clientes el mejor proyecto al menor coste posible y con una gran rigurosidad y transparencia en su ejecución. 

Además de desarrollar y producir nuestras series, en España también ofrecemos servicios de producción en el País Vasco e Islas Canarias que nos permiten completar la financiación de estas producciones ajenas.  

Hoy en día, vemos en la coproducción y la asociación con el talento una manera de lograr eficiencia en la producción, y en los numerosos incentivos fiscales, una ventaja para impulsar los proyectos. Desde su fundación en España 10 años atrás, Onza tiene en su ADN el buscar modelos de negocio con alianzas, manejo de incentivos y modelos creativos de negocio en los que nos sentimos muy cómodos trabajando. 

¿Y de qué manera Onza Américas y el mercado latinoamericano se benefician de esto?   

JMI: Gracias a los incentivos fiscales, somos capaces de prestar servicios para producciones de América Latina desde España que logran abaratar mucho sus costes. Están pudiendo abordar contenidos que, de otra manera, tendrían un coste casi un 40% mayor.  

IH: En Onza Américas somos grandes promotores de la coproducción y potenciamos nuestro alcance internacional a través de Onza en España y su expertise en la gestión de incentivos fiscales con el fin de reducir el riesgo para los compradores sin perder la calidad de producción que requieren para su audiencia. Disponemos de equipos comerciales tanto en Estados Unidos como en Latinoamérica y España que mantienen un contacto directo y continuo con todos los clientes de plataformas y televisión lineal.  

En cuanto al contenido, una de nuestras grandes ventajas en el mercado latino es nuestra historia y relación intensa con el melodrama, un género hoy reivindicado y revisitado en todas las producciones y que manejamos muy bien. 

Por otro lado, estamos experimentando una forma de trabajo muy enriquecedora de contribución y diálogo entre España y América, compartiendo historias, proyectos, importando y exportando los increíbles talentos que tenemos a ambos lados del Atlántico, tanto delante como detrás de las cámaras. 

¿Cuál es la experiencia de Onza trabajando con fondos de inversión?  

JMI: Al menos en España, los fondos de inversión no invierten a riesgo, con lo cual no es un fondo de inversión al uso. Por hacerlo más cercano, es un concepto más de asesoramiento financiero a clientes de banca privada: son unas personas que tienen unos clientes a los cuales les dan confort y para eso buscan el vehículo donde poder invertir y tener una rentabilidad del 20%. 

Nosotros llevamos ya tiempo trabajando esto y funcionamos con muchísimo rigor, robustez y transparencia, y eso está generando que en muchos casos el inversor venga directamente a nosotros.  

La serie ‘Atasco’ es una coproducción con Publicis Rebellion. ¿Cómo ven la entrada de agencias de medios y marcas a la coproducción de contenidos? 

JMI: En Onza somos muy pioneros en ese tema. ‘Atasco’ ha sido un éxito rotundo en Prime Video y con Publicis Rebellion tenemos una relación excepcional. De hecho, ya estamos desarrollando dos temporadas más, que es un dato muy relevante. El éxito de esta primera experiencia nos está llevando a otros proyectos en los que estamos trabajando juntos.  

Además, dentro del grupo Onza tenemos la agencia TBC, que trabaja muy bien el branded content, buscando que el contenido tenga un sentido a nivel de marca. Yo creo que es una tendencia clara, las marcas quieren estar en los contenidos de una manera cada vez menos explícita y más en profundidad.  

¿En qué momento del desarrollo de un proyecto Onza decide invertir? 

IH: En general preferimos proyectos que, aunque se encuentren en un estado inicial, tengan disponibles materiales que nos permitan evaluar profundamente su potencial. Una biblia esbozada o un primer borrador de piloto siempre ayudan a que podamos apostar por invertir en ese proyecto.  

Aunque sea más complicado, también podemos recibir presentaciones en una fase más inicial, siempre y cuando reflejen claramente el tono propuesto, el conflicto, los perfiles de personajes y el arco de los protagonistas.  

También entramos en proyectos que están completamente desarrollados desde el punto de vista creativo, pero que necesiten de una productora solvente como la nuestra para realizar toda la parte comercial, financiera y de producción.  

¿Cuáles son los principales desafíos a los que se enfrenta Onza hoy? 

IH: En cuanto al aspecto financiero, estamos viendo una contracción de los presupuestos en muchas plataformas, mientras siguen exigiendo el mismo nivel de calidad.  

Además, el alto nivel de competencia y la demanda reciente de las plataformas han provocado un incremento en el coste de producción que no siempre refleja la realidad actual de un mercado más contraído. Las productoras encontramos más dificultad para colocar los proyectos con el ritmo y la agilidad con la que lo hacíamos previamente. Sin embargo, a pesar de todo esto, siguen existiendo oportunidades y la necesidad de colaboración. 

JMI: Siempre van a existir desafíos. Para mantenernos relevantes y competitivos en España debemos ser capaces de conformar equipos profesionales de primer nivel, que permitan a los socios de fuera sentirse cómodos y respaldados.  

Y la otra clave es ser capaces de estructurarlo y ejecutarlo correctamente. Parece evidente al decirlo, pero no lo es. Si no das ese servicio en tiempo y en forma, con un control administrativo minucioso y transparente, no es rentable ni óptimo para nadie. La capacidad de ejecución marca la diferencia y en Onza hemos demostrado estar a la altura.