CONECTA FICTION & ENTERTAINMENT: Si canales y plataformas no apuestan por contenidos más arriesgados y no se comienzan a aprobar nuevos incentivos fiscales, México corre el riesgo de dejar de ser competitivo en la arena internacional, advirtieron varios productores mexicanos durante un panel en Conecta Fiction & Entertainment.
Con 120 millones de habitantes y casi 70 millones de hispanos viviendo en Estados Unidos (en su mayoría de origen mexicano), México es hoy un mercado clave para cualquier canal, plataforma o productora no solo por su potente mercado local sino como puerta de entrada para la audiencia US Hispanic.
Tanto es así que, a día de hoy, la Ciudad de México está albergando la producción en simultáneo de 50 series o películas cada mes.
Sin embargo, un reciente aumento en los costos de producción, el fortalecimiento de su moneda local con respecto al dólar y una ausencia de apoyos gubernamentales ponen en riesgo el futuro del sector, señalaron ejecutivos de BTF, Buendía Estudios México, Lemon Studios, Atenea Media, Gato Grande y Estudios Churubusco.
“Empezamos a visualizar que el mercado en México, sobre todo en la Ciudad de México, está copado y eso hace que los precios empiezan a subir. Hasta el talento se empieza a volver loco con lo que pide”, expresó Francisco Cordero, CEO de BTF Media.
Cordero lamentó también la ausencia de incentivos fiscales apropiados y la poca libertad de los estados mexicanos para impulsar los suyos propios ya que, según la legislación actual, toda decisión impositiva debe ser tomada por el Gobierno Federal.
Pese a esto, el estado de Jalisco anunció en enero durante Content Americas sus propias ayudas, al igual que más recientemente el de Quintana Roo hizo lo propio.
“Es nuestra responsabilidad como productores unirnos y hacer un frente común para solicitar al gobierno una solución para los incentivos”, dijo Cordero, cuya productora BTF está ayudando al gobernador de Jalisco con su plan de incentivos fiscales al tiempo que construye, a través de su joint venture con Secuoya, el Grupo Micelio, el Guadalajara Content City en dicho estado.
“Sin incentivos fiscales, con los costos que hay, esto no lo sostiene la industria. Tendríamos que reunirnos seriamente los productores y proponer algo que nos haga más fuerte a todos”, agregó Ana Celia Urquidi, productora ejecutiva de Atenea Media.
“En México nos conocemos entre todos y todos estamos luchando contra las mismas cosas. Sin embargo hay que reconocer que no hemos sido capaces de hacer una industria de productores, de tener una unión para defender los intereses de los productores”, agregó.
El aumento de los costos de producción es otra preocupación entre los productores de ficción mexicanos, problema que tiene su raíz en el agresivo ingreso de las plataformas a la producción local años atrás.
“Hay un poco de responsabilidad de las plataformas en los presupuestos, que a veces vienen a romper el mercado, ofreciendo cifras exorbitantes”, señaló Ana Paula Valdovinos, Head of Production & Development Latam & US Hispanic de Buendía Estudios, productora conjunta de las operadoras españolas Atresmedia y Telefónica.
Erwin Neumaier, director general de los Estudios Churubusco, señaló no obstante que los propios gastos de las plataformas “empiezan a nivelarse”. “El ingreso de las plataformas rompió el mercado local. Llegó un punto que no podías contratar a nadie. Pero esas cosas empiezan a nivelarse, porque las propias plataformas se han dado cuenta de que estaban pagando demasiado”.
Para Pato Portillo, director de Contenidos de Lemon Studios, la ausencia de riesgo en los contenidos es otra de las barreras que el audiovisual mexicano deberá sortear para mantenerse competitivo.
“El reto principal es atrevernos a contar las historias que siempre hemos querido, pero que siempre nos han dicho que no se podía. Tenemos que empezar a atrevernos, a no quedarnos en lo que creemos que va a funcionar sino a empezar a hacer lo que queremos hacer”, opinó.
En ese sentido, y coincidiendo con Ángel Inzunza de Amazon Studios México, opinó que en México se puede innovar en géneros siempre y cuando el melodrama esté presente de algún modo.
“Claro que podemos contar esas historias de ciencia ficción si tiene esa base melodramática”, señaló, y puso como ejemplo ‘Control Z’, serie de Lemon para Netflix, que con una apuesta a contar con personajes muy diversos logró conectar con las audiencias juveniles mexicanas y del resto del mundo.
“A eso me refiero con atrevernos. A ir un paso más. Ir al menos evolucionado paso a paso”, señaló Portillo.
Para Paco Cordero, parte de la falta de riesgo se explica también por la aversión de las propias plataformas a darle libertad a los productores.
“Como productores o creadores proponemos, pero a lo mejor el ejecutivo no quiere tomar el riesgo. Y luego fracasa el contenido y los que pagan la culpa somos nosotros. Tenemos que complementar más el diálogo con los ejecutivos de TV y plataformas, para entender qué están buscando, tener más insights sobre lo que ellos perciben de su mercado. Sin eso, lo que hagamos obviamente va a ser un fracaso”.
Ana Paula Valdovinos agregó que sin datos, los productores están creando a ciegas.
“Los datos de éxito y fracaso que tenemos están regidos por las plataformas. Y no nos los dan. No sabemos las tendencias. Ellos buscan lo que creen que va a funcionar, nos dicen que fue un éxito o un fracaso, pero no te dan un solo dato. Antes había ratings, malos o buenos, pero al menos había un punto de parámetro. ¿Ahora cómo sabes?”, cerró.