CONTENT LONDON: La directora de Estrategia de Adquisición de Contenido de Netflix para Europa, Medio Oriente y África (EMEA) ha rechazado la idea de que la plataforma quiera retener los derechos de todo, afirmando que poseen “menos del 25% de los derechos de IP del contenido europeo”.
Lina Brounéus, quien se unió a Netflix en 2018 tras su etapa como Chief Content Officer en Viaplay, dijo que el streamer ha trabajado mucho para garantizar que sus acuerdos en EMEA sean flexibles.
“No somos dueños de todo a nivel mundial a perpetuidad. Hacemos muchas licencias de segunda ventana, coproducimos, analizamos las cosas en todas sus etapas”, explicó. “Creo que es una gran evolución y un gran paso adelante”.
En términos de lo que Netflix está buscando en la gigantesca región EMEA, Brounéus dijo que los ejecutivos locales tienen la responsabilidad de determinar qué contenido adquirir para sus respectivos territorios.
Si bien la programación cambia de un mercado a otro, Brounéus dijo que una conclusión clave a tener en cuenta es que, considerando todos los suscriptores de Netflix a nivel mundial, los espectadores ven un promedio de seis géneros diferentes al mes, y alrededor del 70% de ese consumo corresponde a contenido de fuera de su país de origen.
“Entonces, lo que debemos hacer es seguir teniendo ese ritmo constante de buen contenido de todos los mercados y de todos los géneros”, dijo.
Las cuotas obligatorias de inversión que rigen en varios mercados europeos no disuadirán a Netflix de invertir en la región EMEA, enfatizó Brounéus. “Si los responsables políticos ven que es necesario tener una intervención en el mercado, creemos que es importante que sean justas y dejen margen para la flexibilidad, de modo que haya espacio para la innovación”.
La ejecutiva reafirmó los planes de la plataforma de continuar invirtiendo y coproduciendo en toda la región tras 18 turbulentos meses en los que varios competidores se retiraron de ciertos mercados o cambiaron de estrategia.
“Lo que nosotros y nuestros competidores sabemos es que el streaming es un gran negocio, pero también un negocio difícil”, dijo Brounéus. “Estamos muy comprometidos a seguir invirtiendo y creciendo en estas regiones”.