Por Camila Jiménez Villa
Las historias contadas por creadores latinx/e amplían su espectro y su enorme potencial de viajar.
Históricamente, las series de crimen sobre el narcotráfico en las fronteras han sido una forma eficaz de contar historias auténticas que involucran tanto a América Latina como a Europa. Y como productora de la serie de Netflix ‘El Chapo’, sé muy bien cuán exitoso puede ser un narcodrama alrededor del mundo.
Es algo ingenuo pensar que se puede contar una historia sobre el poder y la política en América del Sur sin tocar ese mundo, ya que lamentablemente suelen estar muy entrelazados en muchos de nuestros países. Pero en The Immigrant queremos trascender las historias de criminales. Hay muchas más historias latinx/e que contar que muestran todo el espectro de nuestra humanidad.
No hay duda de que el mundo está reconociendo el valor del contenido en idioma español. Crecí entre Italia y Colombia, por lo que siempre estoy buscando oportunidades de coproducción entre Europa y América Latina. Pero a menudo puede ser difícil encontrar historias que sean orgánicas, con una relevancia genuina para ambos territorios.
Incluso las copros naturales entre América Latina y España no son tan sencillas como algunos podrían esperar, a pesar del lenguaje compartido. El desafío es encontrar una historia auténtica que resulte innegable para los commissioners de ambos continentes.

Tener a Fremantle como socio estratégico nos permite dialogar fácilmente sobre oportunidades de coproducción con empresas de toda Europa. Sin embargo, sigue siendo un desafío convencer a un commissioner de que se sume con una financiación significativa cuando la historia no está claramente arraigada a su país. Nuestro trabajo consiste en convencerlos de que una historia en México, una historia en Argentina o una historia en Guatemala pueden viajar.
Los creadores afrolatinx e indígenas son vitales a la hora de contar historias en las comunidades latinx/e. Para nosotros es fundamental elevar las voces de las comunidades que han sido los pilares de nuestra cultura, que han creado la música que escuchamos, las historias que contamos. Ha habido una eliminación y una apropiación sistemáticas de las culturas afrolatinx e indígenas en América Latina, y queremos luchar contra el menosprecio de esas comunidades que conforman nuestra esencia. Queremos abrir el espectro; centrarnos únicamente en una perspectiva blanca negaría lo que significa ser Latinx/e.
Tenemos una gran serie, ‘Imperio’, del director y guionista guatemalteco Jayro Bustamante. Al igual que ‘Roots’ en 1977, Imperio se propone transportar al público a un nuevo mundo, sirviéndose del drama de acción y character-driven para presentar una historia que durante mucho tiempo se ha pasado por alto. Está ambientada en todo el continente americano y cuenta con un reparto 100% First Nations. Y tiene el potencial de cambiar la forma en que las personas Latinx/e se perciben a sí mismas, independientemente del idioma que hablen.
Sin embargo, sigue siendo difícil sacar adelante estas historias, ya que las presentamos principalmente a commissioners blancos, quienes a menudo no las ven como su prioridad. Es un camino largo. Pero existe una oportunidad cuando algo se ha pasado por alto durante tanto tiempo y, en nuestra mente, es una cuestión de perseverancia y de continuar alimentando la ambición que impulsa nuestras historias.
Para alcanzar la grandeza, debes sentirte cómodo con el riesgo. Hay mucha consolidación en nuestra industria en este momento. Y yo creo que hoy los mayores riesgos los toman quienes son independientes. A veces, cuando estás en una compañía muy grande que te está pagando mucho dinero, operas desde un lugar de miedo, mirando lo que funcionó antes y tratando de repetirlo.
El rol de un productor independiente es mirar hacia delante. A veces da miedo pero, al final del día, creo que es más gratificante. La grandeza a menudo va de la mano con la independencia. O eso es lo que me digo a mí misma cuando quiero dormir por la noche.