La inversión directa en producción audiovisual podría llegar a los US$ 1.030 millones para 2030 si Brasil lanzara este año un plan de incentivos a la producción a nivel nacional, señaló estudio de la consultora Olsberg SPI.
Actualmente, algunas regiones de Brasil como Río de Janeiro y San Pablo cuentan con planes de cash rebate, pero el país sigue sin contar con un incentivo que funcione a nivel federal ni con una film commission nacional.
De acuerdo a Olsberg SPI, si un plan de cash rebate nacional se lanzara durante 2024 con un cap de US$ 100 millones el sector audiovisual podría llegar hasta los US$ 1.030 millones de inversión directa en producción para 2030. Se trata de un aumento del 34% con respecto a las cifras de 2021.
Esto generaría, además, hasta 15.000 nuevos puestos de trabajo en el sector.
En un plan menos ambicioso, con un cap de US$ 25 millones, SPI pronostica una inversión de US$ 730 millones y 11.000 puestos de trabajo.
Sin la introducción de ningún incentivo las cifras se quedarían en US$ 630 millones y 9.500 puestos de trabajo.
“Un incentivo federal podría ayudar a estimular mejoras a lo largo de todo el sector audiovisual al apoyar con un flujo estable de producciones incentivadas y oportunidades de trabajo relacionadas e inversiones, así como aprovechar las recientes mejoras impulsadas en el sector”, expresaron desde la consultora en relación a los recientes estímulos introducidos por el gobierno brasileño y las nuevas regulaciones.
De acuerdo a Olsberg SPI, el cash rebate sería la herramienta más indicada para el caso de Brasil, que debería aprender de los casos de España, Colombia, Portugal y Uruguay.
