Eccho Rights cumple 10 con la inversión dirigida a apoyar a los productores independientes

A través de la financiación y preventa de proyectos en etapa de desarrollo, distribución de latas y formatos, y montetización de catálogos en plataformas DTC, la compañía liderada por Fredrik af Malmborg está decidida a protagonizar un futuro donde el productor esté en el centro del negocio.

Fredrik af Malmborg este sábado en Estambul

“Hace 11 años, un buen amigo me dijo: ‘Tengo una serie turca, ¿quieres verla?’ Yo fingí interés, tenía expectativas nulas, pero llegué a casa, puse ‘Ezel’ y me enamoré. Y así comenzó esta aventura”.

Fredrik af Malmborg repasó los principales hitos de Eccho Rights este sábado en el Feriye Palace de Estambul, donde congregó a clientes, medios y amigos para celebrar los 10 años de una compañía que nació como una distribuidora de series y hoy es además una agencia de desarrollo con una apuesta decidida por la coproducción de proyectos.

Con oficinas en Estocolmo, Estambul, Londres, Madrid y Seúl, desde julio de este año Eccho pertenece a Night Train Media, firma alemana de inversión y financiación que adquirió la participación mayoritaria que desde 2018 tenía el gigante surcoreano CJ ENM.

“Seguimos siendo una empresa independiente y yo sigo manteniendo una participación sustancial. Nos sentimos más alineados con estos socios”, dijo a Cveintiuno af Malmborg, único CEO tras la salida de Nicola Söderlund este julio.

La transformación de Eccho en esta década quedó patente cuando el ejecutivo enumeró sus grandes títulos: ‘Ezel’ fue su primera serie turca; ‘Elif’ lo cambió todo con sus 1.160 episodios y ventas a decenas de países; ‘Honor’ fue su primera serie nórdica y la más vendida hasta hoy; ‘Chrysalis’ fue uno de los más grandes éxitos en Turquía; ‘Desperate Measures’ salió de su oficina de Londres, abierta en 2021 y donde tienen seis producciones en desarrollo; ‘Servant of the People’ logró este año más de 40 territorios por culpa de la guerra; y ‘Golden Boy’ lleva tres capítulos al aire y logró más que duplicar el share de Star TV.

El share de ‘Golden Boy’ fue de 10,24%, 20,39% y 23,24%, cuando el promedio canal es 9,08%

Así, aunque el negocio de la venta de latas y formatos sigue muy vigente, durante este Mipcom muchas de las reuniones del equipo estarán enfocadas en el desarrollo y la coproducción de ficción.

“De los US$ 17.000 millones de presupuesto para contenido que tiene Netflix, 6.000 son para sus originales y 11.000 para adquisiciones. Y creo que la cifra de adquisiciones crecerá incluso más, porque no tiene sentido para ninguna plataforma querer comprar el mundo”.

El slate de proyectos de Eccho hoy es comparable al de cualquier estudio independiente de producción: desarrollan diez series de ficción al año entre Turquía, Reino Unido y los países nórdicos.

“Ese es el plan. Sabemos que no todos ellos conseguirán realizarse, pero es una cifra suficiente para construir el modelo de negocio que queremos seguir”, explicó Fredrik af Malmborg.

¿Y qué modelo es ese? Sumarse con financiación a proyectos en etapas tempranas de desarrollo y convertirse en aliado estratégico de productoras e incluso de canales y plataformas.

“A nivel de negocio, lo más interesante hoy está en lo que llamamos las ‘acquired coproductions’: tienes un canal o plataforma para el proyecto, y entras a prefinanciar o prevender el resto, o asumes tú el riesgo. Ir a vender proyectos a las plataformas bajo el modelo cost-plus no es interesante para el productor. Darle todo a la plataforma siempre ha sido malo. Tienes que tener control, sobre todo cuando los proyectos son muy buenos”, señaló.

La esperada serie irlandesa ‘The Vanishing Triangle’ es un buen ejemplo de esta apuesta. Fue encargada por Virgin Media en Irlanda, que aportó un 5%, y Eccho entró en el desarrollo y logró que Sundance Now (AMC Networks) se sumara a darle luz verde en Estados Unidos y Canadá. “El gap de financiación restante lo conseguimos bastante rápido mediante preventas a unos siete territorios más. Y los productores retienen el IP, lo cual es interesante”.

Así, la compañía basada en Suecia se posiciona como un socio necesario para las productoras cansadas de ceder todos los derechos de sus series a las plataformas.

“Nosotros estamos decididos a apoyar a los productores independientes. Estamos ahí para ayudarlos a construir sus proyectos y en última instancia conseguir luz verde más rápido”.

Af Malmborg también se refirió a los canales de TV tradicionales, que hasta ahora han trabajado de manera separada las adquisiciones y los originales. “Netflix cambió todo eso y ahora estamos abiertos a encontrar nuevos modelos de financiación también con los canales”, aseguró.

Aunque el foco ahora pasa por invertir en proyectos en Turquía, el Reino Unido, Estados Unidos y los países nórdicos, “nunca cerramos las puertas a un contenido nuevo, venga de donde venga”.

Con los estrechos vínculos creados en estos años América Latina y España, ¿podría ser el próximo paso a la hora de buscar desarrollos? “Podría ser. Pero creo que el problema está en la integración vertical de la producción que existe actualmente en España, y algo también en Latinoamérica. Las productoras pertenecen todas a los mismos grandes grupos y, además de que limita muchísimo la producción local, las hace muy poco flexibles y es difícil asociarse”.

Tomarse en serio la distribución DTC

Para Eccho Rights, sus grandes áreas de negocio hoy son tres: desarrollo, distribución de latas y formatos, y direct-to-consumer (DTC), un campo en el que ha crecido muchísimo.

En julio incorporó a Melis Hamamcioglu, quien coordina un equipo de 20 personas encargadas de monetizar el catálogo de Eccho -y potencialmente, de terceros- en YouTube, Facebook y Dailymotion y poco a poco también en canales FAST. Las series son subidas a estas plataformas con cinco doblajes y subtítulos automáticos desde el inicio.

El equipo de Eccho Rights en el 10º aniversario

“Para cualquiera que tenga un catálogo, hay una enorme oportunidad en tomarse más seriamente la gestión DTC. Nosotros hemos financiado series diarias con un año de DTC. Hay mucho potencial”, sostuvo af Malmborg.

“En algunos casos puede que canibalice tus ingresos por publicidad, pero se trata de encontrar una combinación en distintos territorios. Una de las razones por las que la ficción turca es tan fuerte es porque siempre ha sabido combinar un fácil acceso mediante YouTube junto con las plataformas y canales. No es solo una cuestión de dinero, sino también de generar atención hacia la serie”.

Ante la entrada de nuevos competidores al negocio de la distribución de contenidos a terceros -como la reciente noticia de la productora turca OGM Pictures, con quien Eccho todavía tiene acuerdos vigentes-, el CEO lleva el suficiente tiempo en este juego para alarmarse. “Nos gusta trabajar con las productoras en el momento correcto, cuando están haciendo cosas nuevas y se mantienen independientes”, explicó.

Así, con la distribución tradicional “en el sitio en que está”, el crecimiento de la compañía pasará por agrandar sus equipos de desarrollo y de DTC. “Ahora somos 40 personas, creo que en dos años seremos unas 100”.

En Mipcom, Eccho Rights estará en el stand P3.B1 del Palais des Festivals.

Pina Mezzera 16-10-2022 ©cveintiuno

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